domingo, 11 de julio de 2010

AÚN BUSCANDO LA LIBERTAD

-RAÚL CONTRERAS OMAÑA
Hace un par de días este espacio, este blog, esta columna tan personal que con el paso del tiempo se ha convertido en un mundo de amigos, cumplió tres años desde su primer emisión. Y un servidor debería sentirse feliz y afortunado. Sin embargo, el momento histórico que atraviesa nuestra Nación más bien nos provoca serias reflexiones.
En julio de 2007, al comenzar a escribir en esta página, nunca imaginé que tres años después nuestro país ganaría el galardón del lugar más violento del mundo. México se ha convertido en refugio de la inseguridad, la intolerancia social, el fraude político, la impotencia institucional, la ingobernabilidad, la opresión, la corrupción permeada a todo nivel y, sobre todo, de la impunidad -reflejo fiel del verdadero estado de civilización de los pueblos; porque de nada sirve que existan miles de leyes, o que sean creadas miles más, si no se tiene la capacidad jurídica o política de aplicarlas, de hacerlas valer, en bien de los ciudadanos-.
Vivimos en un país surrealista, donde vemos morir a criminales e inocentes, a políticos y a periodistas, a jóvenes y mujeres por igual. Y creo que es momento de pensar que debemos actuar, como sociedad unificada, para llevar el crucero de nuestro país a mejor puerto. Porque hemos perdido la inocencia como pueblo, y ahora sabemos que ningún partido político -sea cual sea su color- tiene la fuerza para frenar el caos que viene. Y si no se logra la capacidad de trabajo en equipo en los distintos niveles de gobierno y entre los diversos partidos, a los mexicanos nos quedarán de frente muchos años más de miedo, dolor e incertidumbre.
Pacto ciudadano, acción social, comunicación entre ideologías y grupos con pensamiento político divergente. Participación, denuncia, transparencia, rendición de cuentas, legalidad. Visión de un verdadero Proyecto de Nación a corto, mediano y largo plazo. Parafraseando a Benedetti: Táctica y Estrategia. Es momento de exigir a nuestras Instituciones los planes y resultados que merecemos como sociedad. Es momento de dudar de lo que se nos presenta como realidad, y de buscar las alternativas que brinden a nuestras familias y seres queridos la libertad y la felicidad que merecen, y que desde hace varios años vienen perdiendo. La sola militarización de las calles no es la respuesta si no existe el respeto por la aplicación de la ley. La indiferencia ciudadana, la resignación, y el desinterés como sociedad ante los tiempos que México vive sólo nos llevarán a la desesperanza.
Hoy, a tres años de haber comenzado este espacio, no sólo quiero agradecer a mis amigos el apoyo que me han brindado, o reiterarles mi invitación para continuar siendo parte de esta aventura llamada "Tertulia de los Filósofos" -la que, espero, seguirá adelante todavía varios años más-. Más bien quiero conminarlos a pensar en un México libre, en un México nuevo, y en una sociedad sin temores. Busquemos juntos -y también cada quien en su trinchera- diseñar los planes necesarios para el futuro, participar en ellos, y alcanzar la organización ciudadana que nos permita convertir a nuestro país en hogar de la justicia, la tolerancia y la paz.
Nos leemos en un par de semanas.